Birka: la ciudad vikinga

Birka: la ciudad vikinga

Birka fue la primera ciudad de Suecia situada en la isla Björkö. Es uno de esos rincones de naturaleza primitiva que tanto caracteriza al paisaje sueco: agua, islas, bosques, naturaleza limpia y bien cuidada.

Birka es uno de los asentamientos vikingos mejores conservados. Fundada en el siglo VIII, se convierte en poco tiempo en un importante centro de comercio de artículos decorativos y de lujo, llegando a ser un importante centro de producción, donde los artesanos locales fabricaban cotizados objetos destinados al trueque a partir del hierro o de las pieles de los animales de la zona. Estos objetos eran intercambiados por tejidos bizantinos, vino del Rin, o piezas de joyería árabe.

En esta zona han sido descubiertos y desenterrados antiguos tesoros que han sido inspeccionados por arqueólogos e investigadores desde el siglo XIX. En las excavaciones arqueológicas se han encontrado, incluso, sedas de China, lo que demuestra las extraordinarias relaciones comerciales de Escandinavia en la época de los vikingos.

En la década de 1870, el arqueólogo y etnógrafo Hjalmar Stolpe excavó una cámara funeraria como parte de su investigación arqueológica. En 1889 documentó la tumba como Bj 581, ha sido considerada una de las tumbas más emblemáticas de la época vikinga. El cuerpo fue hallado en posición sentada con prendas de seda y adornos de hilo de plata. Los bienes encontrados en la tumba incluían: una espada, un hacha, una lanza, flechas perforadoras, un cuchillo de batalla, dos escudos y dos caballos, una yegua y un semental.​ Durante 128 años, se asumió que el esqueleto era el de un «hombre endurecido en la batalla». Pero estudios de la década de 1970 cuestionaron la suposición de que el esqueleto fuera masculino.

En septiembre de 2017, un estudio dirigido por Charlotte Hedenstierna-Jonson demostró que el esqueleto era el de una mujer. La conclusión del estudio fue que: «el individuo en la tumba Bj 581 es la primera mujer guerrera vikinga de alto rango confirmada».

Birka fue abandonada hacia el año 960 ó 970, tras lo cual su función como centro de comercio fue parcialmente asumida por la mucho menos importante ciudad de Sigtuna, también ubicada a orillas del lago Mälaren.

¿Cómo llegar desde Estocolmo a Birka? Desde el embarcadero junto al Ayuntamiento, en el Barrio Norrmalm, sale un barco que es exclusivo para visitar Birka. El recorrido dura, aproximadamente, 2 horas. La entrada incluye el viaje hacia Birka, el acceso al museo y una visita guiada por los antiguos campos. Es un perfecto destino para una excursión de día entero. Si además vas en verano, no te olvides llevar el bañador porque al final de la excursión, podrás darte un refrescante baño antes de regresar a Estocolmo. Podéis reservar la excursión en la siguiente página web: https://www.stromma.com/es-se/stockholm/

Una vez que el barco atraca y desciendes en el muelle de Birka, fácilmente te sumerges en este mundo. Pronto descubres que aquí pervive el espíritu de los vikingos. Es una fascinante mezcla de naturaleza, restos arqueológicos y leyenda. Paseas por caminos que tal vez fueron trazados hace miles de años.

Birka, la primera ciudad de Suecia

Birka también ocupa un lugar importante en la historia de Suecia por ser la sede de la primera congregación cristiana del país. En el año 829 el emperador Luis el Piadoso envía al monje benedictino Ansgar para convertir a los vikingos paganos al cristianismo. En lo alto de la colina se levanta una cruz para conmemorar la llegada de Ansgar.

Cruz que conmemora la llegada de Ansgar

Hay que decir que si decides visitar la isla pensando que vas a encontrar ruinas espectaculares o grandes monumentos, lo mejor es que te ahorres el paseo. Pero es un destino muy agradable y que te permite pasar todo un día de relax disfrutando de la naturaleza y el aire limpio. Aún así, hay muchas cosas curiosas que ver. Nada más llegar, lo primero que puedes ver al bajar del barco es un museo con diversas piezas vikingas.

Representación de un pueblo vikingo en el museo vikingo en Birka

Y poco más adelante, puedes pasear por la reconstrucción de un pueblo vikingo.

Asentamiento vikingo (Birka)

Como ya es sabido, los vikingos eran paganos. En Birka podrás observar algunas reproducciones de sus expresiones religiosas, como este conjunto de lanzas que no se sabe muy bien que representaban:

Conjunto de lanzas de madera (Birka)

O estos curiosos troncos caracterizando unas "runas" de madera en forma de barco:

Runas en forma de barco (Birka)

En 1993, Birka entra en la lista de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. Ir a Birka es casi como viajar atrás en el tiempo.

Puedes ver más fotos de esta antigua ciudad vikinga en la siguiente dirección: http://www.facebook.com/mibaulviajero

Mamen

@mibaulviajero