La gastronomía finlandesa nace de la mezcla de tres culturas culinarias diferentes como la cocina sueca, rusa y alemana. El duro clima del país siempre ha sido uno de los factores que ha marcado el carácter de su gastronomía, conocida por combinar la cocina de mercado y la alta cocina. La cocina finlandesa ofrece platos diferentes para cada mes del año. Antiguamente, debido al clima, los habitantes se veían con la imposibilidad de disponer de frutas y verduras frescas, lo que causó un alto consumo en tubérculos, pan de centeno y productos lácteos fermentados, acompañados, a veces, con carne o pescado en conservas. Tradicionalmente no había disponible muchas especias salvo la sal, y el uso de hierbas frescas solo era posible en los meses de verano. Los lagos y bosques eran la fuente principal de alimentos, siendo los productos del bosque los principales ingredientes en la cocina. A parte del clima, un hecho histórico, el denominado "Asunto de Karelia" también ha contrib...